Hoy se le queda la chica no muerta
pegada a la entrepierna,
mañana de tanto rascarse
se habrá largado.

Dicen que casi se muere de pena
con el estómago lleno de amapolas,
y que se pasó sobando los recuerdos
hasta que le resultaron sucios
Dicen que sus mujeres bonitas
acaban oliendo siempre a casquería
a pesar del formol y las buenas intenciones.

Hoy me da la espalda enorme
para que le pinte los lunares.

Comentarios

Entradas populares de este blog